«El Cadillal es un lugar maravilloso, en donde la gente va a refrescarse y a pasar el día. Como es sabido, el día 25, como el 1ero de Enero, son días en los que la gente va en gran concurrencia», afirmó Esteban Díaz.
«Gracias a Dios el 25 de diciembre no tuvimos que lamentar ninguna víctima. Esto se debe a la prevención, nuestro principal objetivo. ¿De qué manera lo hacemos? Tratando de indicarle a la gente dónde pueden ingresar a nadar, y cómo evitar estos tipos de accidentes», agregó el guardavidas, que cuenta con más de 2 décadas de experiencia.
«Está debidamente delimitada la zona del balneario, pero mucha gente, muchos jóvenes quizás, buscan zonas donde no está tan concurrido, y es ahí donde está el peligro, entonces uno tiene que estar atento, es por eso que trabajamos conjuntamente con la Policía Lacustre, que se encarga en sus embarcaciones de ir a esos lugares en donde está prohibido el ingreso. Y pedirles por favor a los bañistas que se retiren de esos lugares, vayan a las zonas delimitadas, que están debidamente cuidadas por el grupo de los guardavidas».
Con respecto a si se presentaron los inadaptados de siempre, aquellos que aparecen alcoholizados y no respetan las recomendaciones, Esteban indicó: « La verdad que cambió mucho el Cadillal, años anteriores había mucho alcoholizado. Ahora los controles hacen que El Cadillal sea totalmente diferente. Concurren más familias. Al estar más conscientes se cumplen las recomendaciones».
«Todos los días, desde las 10 de la mañana hasta las 20hs, es el horario donde se recomienda que la gente esté en el agua. La gente hace caso, sabe del peligro que significa que no estén los guardavidas», dijo.
«El cuerpo de guardavidas, está formado por 24 personas con las que nos dividimos los turnos», concluyó.