De acuerdo a los investigadores, las imágenes habían sido filtradas por un joven de 17 años que había mantenido una relación con la víctima, también menor de edad. Sin embargo, esa relación había terminado.
“A partir de la denuncia de los padres de la víctima, que se dieron con estas imágenes, realizamos estos procedimientos en la casa de los padres del acusado. Así es que en un negocio en Concepción, que también pertenece a su familia, secuestramos un celular con importante evidencia para la causa”, explicó el comisario Ramón Moreno, titular de la División Delitos contra las Personas.
De uno de los domicilios, la policía secuestró el teléfono desde donde se habría realizado el envío de las imágenes y en otra propiedad en Concepción los efectivos incautaron una escopeta calibre 16 doble caño, junto con una caja de 25 cartuchos del mismo calibre. Todo quedó a disposición de la unidad fiscal que interviene en la causa.
Los procedimientos fueron realizados por un equipo en el marco de la causa caratulada como “difusión de imágenes y espectáculos pornográficos de menores” en la que interviene la Unidad Fiscal de Delitos contra la Integridad Sexual.
