El pasado 17 de enero, Pampita celebró su cumpleaños a lo grande en un lujoso restaurante de la Costanera junto a su esposo, Roberto García Moritán, quien cumplió al día siguiente, sus hijos y amigos. Lo más llamativo fue que también estuvo su expareja, Benjamín Vicuña, con quien se muestra más seguido desde que él se separó de la China Suárez.
Si bien parecía un festejo más como el que nos tiene acostumbrados la modelo, en el momento de tomarse las clásicas fotos de toda celebración la modelo abrazó a su marido de una forma muy extraña y haciendo un llamativo gesto con sus manos.
En la imagen que compartió la empresaria en sus redes se puede ver que su dedo medio y anular aparecen flexionados configurando los clásicos “cuernitos” con sus dedos índice y meñique. ¡Tremendo!
En Gente, Hugo Lescano, Director del Laboratorio de Comunicación No Verbal y Consultor de la OEA (Washington DC) en Negociación y Comunicación no Verbal, analizó la postal y explicó qué quiso decir la conductora.
“Desde la ciencia de la comunicación no verbal podríamos decir que estamos ante un fenómeno conocido como ‘fuga emblemática’. Nos referimos a los gestos ‘emblemáticos” señalando aquellos gestos que no necesitan interpretación ya que en un contexto geográfico e histórico determinado poseen significados construidos socialmente”, aseguró el especialista al comenzar su análisis.
Y agregó: “Por ejemplo el dedo pulgar elevado para decir que ‘todo está bien’, el dedo índice perpendicular a los labios para pedir silencio. Y hablamos de ‘fuga’ refiriéndonos a los gestos significativos, realizados inconscientemente. Justamente el gesto realizado por Pampita posee dos significados muy conocidos el conjuro contra la mala suerte o los cuernos de la infidelidad“.