Elon Musk criticó recientemente los cascos de realidad virtual por ser incómodos. Al magnate, propietario de Tesla y Space X, solamente le importa la comodidad a la hora de entrar en el metaverso. Sin embargo, no se refirió a las posibles lesiones que pueden acontecer por utilizarlo al extremo. Quizás porque no había pasado nunca hasta que un jugador alemán sufrió una grave lesión en el cuello.
Este hombre, de 31 años, se encontraba jugando con el casco de forma tan intensa que sus movimientos de cuello, prolongados durante mucho tiempo, provocaron que se lesionara una vértebra de su cuello. Al notar que le dolía el hombro fue al Hospital de la Universidad de Leipzig para que le atendiera.
Al hacerse pruebas se pudo ver que la vértebra C7, que se encuentra justo en la base del cuello justo por encima de los hombros, presentaba una fractura. Los médicos creen que se trata del primer caso de fractura por estrés relacionada con la realidad virtual.
Mark Zuckerberg con su casco de realidad virtual Oculus. Foto: Facebook – Oculus
El jugador necesitó un periodo de 12 semanas para poder recuperarse y durante la mitad de tiempo necesitó de un collarín para poder mantener firme el cuello. Este tipo de lesiones por estrés son frecuentes en soldados, runners, jugadores de volleyball, jinetes y, en su momento, también en mineros.
“Dado que el paciente había estado jugando a títulos de realidad virtual durante muchas horas a la semana con dispositivos livianos en sus manos y en su cabeza se presume que una fractura de tipo estrés parece ser la razón más probable”, resumió el doctor David Braur, quien atendió al paciente, al diario inglés The Sun.
“Los movimientos repetitivos y los intensos hábitos de juego podrían haber provocado una fractura por fatiga”, concluyó el equipo de médicos.
No es extraño que estas lesiones se puedan producir ya que los equipos de realidad virtual, que cada vez son más populares, pesan algo más de medio kilo y con ellos se realizan movimientos bruscos que, con el tiempo, pueden llegar a ser virtuales.
Vulnerabilidades en varios cascos de realidad virtual
Los lentes de realidad virtual de Google, Cardboard, también registran vulnerabilidades. (AP Photo/Mark Lennihan)
Por otro lado, estos dispositivos quedaron recientemente en medio de una polémica sobre la seguridad que. Al parecer, varios modelos de visores de realidad virtual y aumentada, que actualmente se comercializan a nivel mundial, presentan vulnerabilidades de ciberseguridad que exponen a sus usuarios a problemas de privacidad y ciberataques cuando utilizan los comandos de voz.
El descubrimiento fue parte de una investigación que realizaron en la Universidad Rutgers-New Brunswick, de Estados Unidos, quienes publicaron su estudio Face-Mic, en el que han analizado las funciones de seguridad que rodean a los comandos de voz en los visores.
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“Face-Mic es el primer trabajo que infiere información privada y confidencial al aprovechar la dinámica facial asociada con el habla humana en vivo mientras se usan dispositivos AR/VR montados en la cara”, dijo Chen. “Nuestra investigación demuestra que Face-Mic puede derivar la información confidencial del usuario de los cascos con cuatro auriculares AR/VR convencionales, incluidos los más populares: Oculus Quest y HTC Vive Pro”.
La investigación demostró que los ciberdelincuentes podrían usar dispositivos de realidad virtual (AR/VR) populares con sensores de movimiento incorporados para registrar dinámicas faciales sutiles asociadas al habla. Con esa información podrían sustraer datos privados a través de comandos de voz, incluidos tarjetas de crédito y contraseñas.
El estudio estuvo enfocado en tres tipos de vibraciones capturadas por los sensores de movimiento de los cascos, incluidos los movimientos faciales asociados con el habla, las vibraciones transmitidas por los huesos y las vibraciones transmitidas por el aire. Al respecto, Chen señaló que las vibraciones transmitidas por los huesos en particular estában codificadas con información detallada sobre el género, la identidad y el habla.
“Al analizar la dinámica facial capturada con los sensores de movimiento, descubrimos que tanto los dispositivos de cartón como los de gama alta sufren vulnerabilidades de seguridad, que revelan el habla sensible del usuario y la información del hablante sin permiso”, remarcó Chen.
“Dados nuestros hallazgos, los fabricantes de visores de realidad virtual deberían considerar medidas de seguridad adicionales, como agregar materiales dúctiles en la cubierta de reemplazo de espuma y la banda para la cabeza, que pueden atenuar las vibraciones faciales asociadas con el habla que serían capturadas por el acelerómetro/giroscopio incorporado,”, concluyó la investigadora.
SL
