La Policía de Misiones intenta detener a un hombre que incendió la casa de su ex pareja con sus dos hijos adentro. Los chicos, que tienen 14 y 8 años, pudieron escapar a tiempo, pero la pequeña vivienda de madera quedó reducida a cenizas pese a la intervención de bomberos y policías.
El brutal caso de violencia familiar ocurrió el fin de semana en la localidad de El Soberbio, en la frontera con Brasil. El hombre, que estaba alcoholizado, se puso muy violento cuando llegó a la vivienda que está sobre la ruta provincial 13 y no halló a su ex, que a esa hora todavía realizaba changas en una chacra de la zona.
El base al relato de Camila (14) y Willan (8), que se hallaban al cuidado de David (17), Carlos Da Silva arribó al lugar el sábado al atardecer y comenzó a insultarlos e intentó atacar a golpes al adolescente. Los tres chicos buscaron refugio dentro de la vivienda y el hombre se alejó del lugar.
Unos minutos después, Da Silva, que es el padre biológico de la nena y el chico de ocho años, volvió con un bidón de nafta e inició el incendio que arrasaría en pocos minutos con la construcción de madera.
Destruida. Así quedó la casa que el hombre incendió después de rociarla con combustible.
Los hermanitos y su amigo lograron escapar a tiempo de las llamas. Los tres sólo pudieron presenciar cómo las llamas consumieron su hogar pese a la llegada de una dotación de Bomberos.
La Justicia ordenó la detención de Da Silva, pero hasta el momento no pudo ser localizado. Los investigadores sospechan que una vez consumado el incendio, el hombre cruzó el río Uruguay para buscar refugio en la casa de familiares que residen en Brasil.
La investigación del hecho quedó a cargo de la Comisaría de la Mujer. La madre de los chicos, Adriana Dos Santos (29), contó a las agentes que había decidido cortar la relación con el hombre por los constantes hechos de violencia conyugal.
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