En la primera jornada del juicio oral a los acusados por el derrumbe de un entrepiso en el boliche Beara, en el que murieron dos jóvenes y hubo más de 50 heridos, el Tribunal Oral Criminal y Correccional N° 7 rechazó un pedido de probation. Los abogados defensores habían ofrecido que los empresarios imputados realizaran tareas comunitarias y les dieran una “reparación económica” a las familias de las víctimas para no ir a juicio.
Las defensas de Juan Carlos Yun, Agustín Dobrila e Iván Fliess, los tres empresarios responsables de Beara, ofrecieron 5 millones de pesos para los familiares de Ariana Lizarraga (21) y de Paula Provedo (20), las dos jóvenes que murieron cuando, el 10 de septiembre de 2010, cedió el entrepiso del boliche, ubicado en Palermo.
En la investigación se comprobó que ese entrepiso estaba construido con madera, aluminio y yeso, pero que no tenía vigas.
El entrepiso que se desplomó en Beara en la madrugada del 10 de septiembre de 2010.
“En nuestro país, doce años de juicio ya son más que una condena“, argumentó el abogado de Fliess, Julio Golodny, al solicitar la suspensión del juicio. También destacó que ninguno de los imputados tiene antecedentes y que no cometieron faltas en los años que siguieron al derrumbe. Además, subrayó que los tres empresarios eran jóvenes en el momento en que ocurrió el siniestro, cuando tenían cerca de treinta años.
Tanto el fiscal Oscar Ciruzzi como los representantes de las querellas rechazaron el pedido de probation. Afirmaron que no había un conflicto a resolver, sino que se estaba ante un acto criminal que debe ser juzgado.
Yun, Dobrila y Fliess, que conformaban la sociedad El Viejo Sabio, están acusados de “homicidio culposo agravado por el número de víctimas en concurso ideal con lesiones culposas y leves”. También deberán responder por el delito de “cohecho activo en concurso real”, ya que habrían pagado coimas a funcionarios del Gobierno porteño y policías para lograr la habilitación del local y que pudiera funcionar como discoteca, a pesar de que estaba registrado como casa de fiestas.
Al frente de la audiencia estuvo el juez Alejandro Noceti Achával, quien consultó a todas las partes acerca del pedido de los empresarios. Entre esas partes estaban los padres de las chicas que murieron en el derrumbe y una de sus amigas, que resultó herida.
“Está manchado con sangre el dinero que nos están ofreciendo: todos tienen vida, las únicas que no la tienen son Leticia y Ariana”, sostuvo la mamá de Provedo, Alicia Tagliaferro.
La madre de Lizarraga coincidió: “La oferta de dinero es ofensiva. A mi hija le quitaron la posibilidad de tener una familia, de tener hijos. A mí me quitaron la posibilidad de tener entre mis brazos un nieto”.
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Beara estaba habilitado como restaurante, café, bar y casa para fiestas privadas, pero no como boliche. Foto de archivo / Lorena Lucca
Después de escuchar a las partes, el Tribunal rechazó por unanimidad el pedido de probation. Se basó en el artículo 353 del Código de Procedimiento Penal, que establece que una vez fijada la fecha de un juicio oral “ningún recurso puede impedir la realización del proceso”.
Durante la primera jornada del juicio, además, se escucharon distintos pedidos de nulidad elevados por las defensas privadas y oficiales de los imputados. El tribunal los contestará en la próxima audiencia, que se realizará este miércoles.
En la causa hay 13 acusados. Entre ellos, el ex responsable de la Dirección General de Habilitaciones y Permisos del Gobierno de la Ciudad, Martín Diego Farrell. Se lo acusa de los delitos de “homicidio culposo agravado por el número de víctimas en concurso ideal con lesiones culposas y leves y cohecho pasivo en concurso real”.
Además, están imputados los exfuncionarios Pablo Saikauskas, Norberto Cassano, Isaac Rasdolsky, Carlos Mustapich y Vanesa Berkowski. También los policías de la Federal Rodolfo Cabezas, Gustavo Flaminio, Luis Acosta y Julio González, quienes habrían recibido sobornos mensuales entre 2007 y 2010 por parte de los dueños del boliche. La “cometa” estaba incluida en el presupuesto de Beara, según se descubrió durante la investigación.
En la madrugada del 10 de septiembre de 2010, en el local Beara de Scalabrini Ortiz 1638 tocaba el grupo “Ráfaga”. A las 3.50, pocos minutos después del fin del recital, colapsó el entrepiso en el que se encontraba el sector vip y se derrumbó sobre la planta baja. Ariana Lizarraga, de 21 años, y Paula Provedo, de 20, murieron aplastadas y más de 50 personas resultaron heridas.
Con información de Télam
NS
