El ex presidente de la histórica Liga Argentina por los Derechos Humanos (LADH) y dirigente K, José Schulman, designó como sus abogados a Maximiliano Rusconi (defensor de Julio De Vido) y Mariana Barbitta (defensora del general César Milani) y logró postergar la indagatoria a la que había sido convocado para el jueves próximo, informaron fuentes judiciales a Clarín.
Schulman es un conocido militante cristinista que insultó al ex presidente Mauricio Macri y convocó a la marcha para “echar” a la Corte el 1° de febrero.
Schulman fue imputado por los delitos de “amenazas y lesiones”, tras agredir a una trabajadora de la terminal de ómnibus de Santa Clara del Mar, y difundirse el video del ataque por los medios y las redes sociales convirtiendo el caso en un escándalo.
La audiencia del jueves próximo se suspendió y reprogramó para el 10 de marzo en la sede de La Unidad Fiscal Funcional Descentralizada de Mar del Plata, informaron a Clarín fuentes judiciales.
El fiscal de la Unidad Funcional de Instrucción descentralizada de Mar Chiquita, Ramiro Anchou, imputó a Schulman (69 años) por “amenazas y lesiones leves agravadas por mediar violencia de género”, tras la denuncia realizada por la joven agredida, que quedó registrada por cámaras de seguridad.
De acuerdo a las imágenes que fueron analizadas por el fiscal Schulman golpeó en la cara e insultó a la mujer que atendía un puesto de la terminal de micros, luego de que el servicio de pasajeros que él aguardaba sufriera una demora.
El hecho ocurrió el jueves de la semana pasada, y tras ser denunciado al día siguiente por la víctima en una seccional policial de Santa Clara del Mar, tomó intervención la fiscalía.
El comportamiento de Schulman fue repudiado por organismos de derechos humanos como Abuelas de Plaza de Mayo, Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora, el Centro de Estudios Legales y Sociales y la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos (APDH), que se solidarizaron además con la mujer y ratificaron su “compromiso incondicional con la sanción de ese tipo de conductas”.
Tras la difusión pública que alcanzó el hecho, la LADH anunció que decidió aceptar un pedido de licencia de Schulman y “comenzar un proceso de evaluación para tomar las medidas correspondientes”. Finalmente, renunció y fue reemplazado por su vicepresidenta.
Asimismo, replicó “la disculpa a la trabajadora y al conjunto del movimiento popular” que hizo el propio acusado desde su cuenta de Facebook, donde aseguró ser “consciente” de que su comportamiento “fue inaceptable y nada lo justifica”.
