Un año después de haber sido vetado por Twitter, Facebook y YouTube, el expresidente de Estados Unidos Donald Trump lanzó este lunes su nueva aplicación Truth Social (verdad social), en un momento en que el magnate busca un nuevo escenario digital para conectarse con sus seguidores y combatir los límites que establecen los gigantes tecnológicos a la libertad de expresión.
La plataforma, que de momento está disponible únicamente en la App Store de Apple, conserva un acceso limitado al servicio. La idea es evitar un colapso. Sus creadores señalaron que estará totalmente operativa para fines de marzo.
Pese a esta restricción, el servicio presentó fallas técnicas poco después de su disponibilidad y se reportó que los suscriptores no pudieron acceder a la app por horas.
Estará totalmente operativa en las próximas semanas.
La mayoría tiene inconvenientes para iniciar sesión. Algunos reciben un mensaje de error cuando intentan introducir una fecha de nacimiento, un correo electrónico o un número de teléfono, mientras que otros dicen que se les ha colocado en una lista de espera.
El único requisito para ingresar a la nueva app es que el contenido publicado debe ser completamente verdadero. Para participar en los chats, habrá que registrarse con un nombre real y crear un perfil que pueda ser verificado. Después de lo cual podrá seguir conexiones personales a través de seguidores, publicaciones y me gusta.
En la nueva red social, las personas podrán publicar “verdades”, que es equivalente a los tuits de la competencia. También se podrá volver a compartir las publicaciones en la propia línea de tiempo para ampliar su cobertura.
Una red social que sólo admite “verdades”. Foto AFP
Al igual que Twitter, el objetivo a vencer, Truth Social no permite modificar sus mensajes. Aunque espera pronto activar el envío de mensajes directos, así como abrir la posibilidad de bloquear a otros usuarios, además de iniciar una política de “cuentas verificadas” para evitar suplantaciones.
“Queremos que nos digan qué les gustaría tener en la plataforma, que es lo opuesto a que un oligarca tecnológico de Silicon Valley le diga a la gente lo que quiere pensar y decida quién puede o no estar”, señaló Devin Nunes, encargado de Trump Media & Technology Group (TMTG).
Similitudes con Twitter
Las similitudes con Twitter son demasiado evidentes.
Algunos analistas sostienen que el equipo de Donald Trump parece haber omitido por completo la innovación en Truth Social para limitarse a copiar sin el más mínimo escrúpulo a la red social de la que el expresidente fue expulsado el año pasado.
Lo único ligeramente diferente en Truth Social parecen ser los colores. El cartel de verificación en esta red social es de color rojo (de una tonalidad parecida al logo del Partido Republicano) y no azul, que es el color de los demócratas en Estados Unidos.
La semana pasada, el hijo de Trump, Donald Jr., tuiteó “es momento de un poco de verdad” y subió la que sería primera publicación del expresidente en Truth Social. “¡Prepárate! ¡Tu presidente favorito te verá pronto!” decía ese mensaje inaugural del ex mandatario.
La aplicación de Trump se une a un creciente ecosistema de productos digitales que satisfacen a los conservadores o son populares entre ellos.
Otras noticias
Rumble, Parler, Gettr y otros servicios han surgido como alternativas a las principales redes sociales. Pero algunos han tenido problemas de crecimiento: Parler, por ejemplo, fue eliminado el año pasado de las tiendas de aplicaciones de Apple y Google en medio de acusaciones de que los manifestantes del 6 de enero usaron la plataforma para incitar a la violencia.
SL
