A principios de los años 60, y fabricado por Peel Engineering Company en la Isla de Man (propiedad de la Corona Británica), irrumpió en Europa el primer modelo que ostentó el título del auto más chico del mundo, el P50.
Aquel particular modelo sólo tenía tres ruedas y medía apenas 1,34 metro de largo, 1 metro de alto y 98 centímetros de ancho. Con un motor de 49 cm3 y 4,5 caballos, lograba una velocidad máxima de 60 kilómetros por hora.
Cabe por una puerta: el lema que usa iEV Motors para promocionarlo.
El P50 pesaba 56 kilos, contaba con un solo faro delantero y ni siquiera tenía marcha atrás: para ir en reversa había que bajarse y arrastrarlo a mano.
La historia vuelve a repetirse 60 años después con una apuesta similar, pero ahora como respuesta a nuevos parámetros de movilidad y ya inmerso en la era eléctrica.
La empresa danesa iEV Motors lanzó su iEV Z, el auto más chico del mundo de la actualidad, resultado de un proyecto iniciado hace 18 años para irrumpir en el mercado con un vehículo 100% sostenible y práctico para el uso urbano.
El iEV Z se abastece de energía solar.
La firma, si bien se aproximó en dimensiones a la referencia histórica del P50, fue más allá con su desarrollo: el flamante modelo, además de ser 100% eléctrico, incorpora paneles solares y cambia de tamaño según las necesidades de su propietario.
Las micro dimensiones del el iEV Z, arrancan en los 1,98 metro de largo, 1,45 de alto y apenas 78 centímetros de ancho, menos que el P50, por ejemplo, lo que hasta le permitiría pasar por una puerta. ¿Su peso? Solo unos 220 kilogramos.
iEV Z, el increíble micro auto que pasa por una puerta
Desarrollado por una empresa danesa, es eléctrico y mide 78 centímetros de ancho.
La posibilidad de “ajustar” sus medidas apunta a lograr una ductilidad que ningún otro modelo lo pueda ofrecer. Según la propia iEV Motors, su creación puede crecer hasta los 2,35 metros para darle espacio a un pasajero más en la parte trasera.
Sin demasiado vuelo en el aspecto estético, la compañía priorizó totalmente su practicidad y economía. Luce como un cubo estilizado con el 50% de su superficie vidriada y partes de policarbonato para optimizar su peso.
El iEV Z saldrá a la venta a fines de 2022: costará unos 5.800 euros.
Su interior cuenta con un asiento estándar y una consola central equipada con un llamativo cuadro de instrumentos. Por su parte, las ventanillas son eléctricas y cada una de ellas representa una salida de emergencia.
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Lo más novedoso, además de su porte, está relacionado con la tecnología que incorpora. El fabricante ofrece una aplicación para descargar en el teléfono desde donde se maneja la función para alargar su carrocería y así sumar una segunda plaza. La app también permite localizarlo a la distancia, abrirlo y cerrarlo, y conocer la carga de la batería.
El iEV Z es un desarrollo de una compañía danesa.
Esta obra de iEV Motors también cuenta con un trabajo especial en su mecánica. Dispone de un motor con una potencia de 1 kW (5 caballos) con el que alcanza una velocidad máxima de 45 kilómetros por hora y, por lo tanto, puede ser conducido en la mayoría de los países europeos por conductores a partir de 15 años. Consigue una autonomía de hasta 100 kilómetros.
Seis veces más chico que un auto, de acuerdo a la comparación de la marca.
El fabricante asegura que este modelo no es una bicicleta o una moto carrozada, y mucho menos un auto convencional, sino “un nuevo concepto en el transporte personal eléctrico”. Y si bien está especificado como un automóvil, es lo suficientemente angosto como para utilizarlo en los carriles de bicicletas que hay en las ciudades.
En la información que reveló iEV Motors avisa que las especificaciones, el rendimiento y los detalles del modelo están sujetos a cambios en un futuro. De todas maneras, el modelo ya es realidad y comenzará a venderse en el mercado europeo a fines de 2022, con un precio cercano a los 5.800 euros.
