Una terrorífica anécdota fue compartida por una joven oriunda de Santiago del Estero a través de Facebook.
No reveló su nombre, pero sí que reside en Capital y que vivía en una casa esquina bastante grande, donde convivían varias familias. Además, asegura que nunca dijo nada porque siempre la trataban de mentirosa o de loca.
El espeluznante episodio comenzó una noche de invierno, en horas de la madrugada, y aquí te lo relatamos:
“Hola amigos, hace poco empecé a seguir la página y realmente es un espacio maravilloso para poder compartir nuestras experiencias que por mucho tiempo callamos por la poca credibilidad“, comienza.
“Bueno la historia que les voy a contar nos pasó a mi mamá y nosotras.
Somos de Santiago del Estero capital, en ese tiempo mi vieja alquilaba un pequeño departamento en una pensión. Era una casa esquina grande, donde vivíamos, varias familias”, continuó.
“Fue en una noche de invierno, en horas de la madrugada, cuando sucedió esto. Estabamos todos durmiendo cuando de repente empezamos a escuchar gritos y llantos. Salimos todos asustados, con mi madre, para ver lo que pasaba.
La chica vecina de al lado de nosotras estaba gritando con desesperación. Ella vivía con sus 3 hijos”, añadió.
“Entre la desesperación que nos agarró a todos los vecinos que salimos a ver el porque gritaba de esa manera nos dió escalofríos, escucharla, sus hijos lloraban y no entendíamos nada todo era muy confuso. Logramos entrar a su habitación y mi mamá se le acercó para calmarla, le preguntó que le pasaba, y ella le decía que había algo que estaba parado en la esquina de su pieza mirándola de una forma macabra, y la queria agarrar, que ella estaba acostada durmiendo y esa cosa la quería atacar“, sigue.
“Nosotros en un principio creímos que habría tenido un mal sueño, pero la joven mujer tenía una crisis de nervios y su rostro era de miedo, no la podíamos calmar, tuvimos que llamar a sus sus padres. Seguíamos sin entender nada. Mi madre junto a vecino, se puso a revisar: nadie podía haber entrado al inmueble. Y contó que cerca del baño sintió como que algo la empujó, pero nadie podía ver nada. Se llevaron a la chica y a sus hijos a la casa de sus padres, para que pudiesen pasar la noche”, detalló.
“Al otro día la mujer volvio a la siesta a buscar unas cosas cuando cruzo el portón de la entrada otra vez entró en una crisis de nuevo, diciendo que esa imagen la de un chico oscuro con la risa macabra la estaba esperando en la puerta.
Sus padres sin esperar más llamaron a un curandero y esté les comentó que pudo ver aquél espectro tal cual ella lo describía, y que este le aparecía porque había hecho un trabajo en ese lugar donde ella vivia”, continuó.
“Pudo librar eso que la seguía, es más hasta contó que una vez que se fue de ahí el curandero esa cosa empezó a seguirlo. Nosotras no llegamos a conocer quien había estado allí antes No sé que habrá sido realmente, pero el terror que tenia esa chica en ese momento por las cosas que veía se veía real. Se fue de allí y en ese departamento las personas no duraban mucho tiempo. Fuimos espectadores y se nos eriza la piel y hasta el día de hoy. Así como existe el bien también el mal”, finalizó.
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