Es el año de las pickups en un mercado en donde las pickups son las vedettes. Y Nissan toma la posta temprana en este 2022 para imponer la renovación de su Frontier fabricada en Córdoba desde el año 2018. Mientras tanto, la Toyota Hilux continúa como líder de su segmento, en Ford se aproxima el desembarco de la nueva Ranger nacional hacia 2023, y en Volkswagen se suceden imágenes de lo que puede llegar a ser la futura Amarok. El rubro, lejos de retraerse, parece mostrar una evolución y crecimiento continuos.
Nissan golpea primero entonces con el anuncio de la entrada en producción durante estos días de la nueva Frontier, que empezará a comercializarse en abril. Las primeras imágenes oficiales la muestran muy evolucionada y a tono con la renovación de sus competidores.
La pickup en la planta cordobesa de Santa Isabel.
Los cambios estilísticos más importantes aparecen en la zona frontal, donde presenta nuevo paragolpes, parrilla y ópticas. Además, estrena formato de llantas, en el paragolpes trasero y en la barra sobre la caja de carga.
En el interior también se apreciará el recambio generacional a nivel tecnológico: nuevo display de 7 pulgadas en el instrumental y la incorporación de una pantalla multimedia de 8 pulgadas (con Android Auto y Apple Car Play). A su vez, se anunció una mejora en los materiales utilizados para la confección de las butacas y el volante.
Las versiones full sumarán una diversos sistemas de asistencia a la conducción (ADAS), como alerta de cambio de carril, alerta de colisión frontal, alerta de punto ciego, alerta de tráfico cruzado, frenado de emergencia, monitor de visión periférica y todo terreno.
Además de Argentina, también se la fabrica en Tailandia y México.
La gama 2022 sumará dos nuevas variantes, Platinum (más elegante) y Pro-X4, con estética más aventurera. Justamente las fotos que oficializó la marca son las de esta última opción en la línea de montaje.
Una profunda renovación en la Nissan Frontier
La Frontier 2022 no se trata solamente de una renovación estética del modelo que ya se afianzó en el mercado local. Por el contrario, hay novedades importantes en el chasis, donde incorporó refuerzos estructurales que buscan mejorar el confort de marcha y la estabilidad con carga pesada. Varios componentes se tomaron de la Mercedes-Benz Clase X, cuyo proyecto se dio de baja hace poco más de dos años antes de salir de la línea de montaje de la misma fábrica.
El interior de la Frontier, con volante a la derecha tal la variante que se produce en Asia.
No se aguardan noticias en cuanto a las motorizaciones, dado que mantendrá a sus dos impulsores clásicos y rendidores: un 2.3 turbodiésel de 160 CV (402 Nm) y el 2.3 biturbodiésel de 190 CV (450 Nm), con la posibilidad de asociarse a una caja manual de seis velocidades o automática de siete marchas. Se ofrecen, además, con tracción 4×2 o 4×4 con reductora.
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“Desde que comenzamos la producción de la primera Nissan Frontier en 2018, hemos demostrado nuestro compromiso con el país y la región, apostando por nuestro potencial para convertirnos en líderes en el desarrollo de manufactura, impulsando el constante crecimiento de la industria, el desarrollo de proveedores locales, y la oportunidad de seguir generando nuevos puestos de trabajo”, explicó Gonzalo Ibarzabal, presidente de Nissan Argentina en ocasión del inicio de producción de la Frontier 2022.
Mantendrá los motores de 160 CV y 190 CV.
El proyecto Frontier en Argentina comenzó en 2015 con una inversión de 600 millones de dólares. Luego, en junio de 2018, salió de la línea de montaje la primera pickup de la marca de fabricación nacional, que fue ganándose un lugar dentro una categoría súper poblada y altamente competitiva.
En 2021 la Frontier tuvo su año más exitoso: aumentaron un 58% las ventas, el mejor prólogo que la planta cordobesa de Santa Isabel podía tener de cara a la producción del modelo 2022.
Además, en septiembre la marca japonesa alcanzó el hito de las 25.000 unidades exportadas a Brasil desde el inicio de la fabricación local. Y este año la Frontier también comenzará a exportarse a Chile y Colombia bajo la normativa Euro 6.
