Ataque sexual o relación consentida. Sobre ese dilema deberá trabajar la fiscalía 4 de Bahía Blanca para sumar pruebas al caso que tiene preso a un sargento de la Policía Bonaerense. Se trata de un agente de 35 años, miembro del Escuadrón de Caballería de la fuerza.
El miércoles pasado, una comisión de la Policía Federal lo detuvo en Vicente López al 2400 de la ciudad del sur bonaerense a pedido del fiscal Diego Torres. En julio del año pasado, un hombre de 25 años denunció al policía por abuso y amenazas ante la Unidad Funcional de Instrucción Judicial 14 bahiense.
Según el relato de la víctima, el ataque sexual habría ocurrido durante el año 2020, cuando el policía lo habría sometido en su domicilio, utilizando su arma reglamentaria como elemento de presión. De acuerdo a la información judicial, el hombre tardó varios meses en “procesar el violento episodio” para denunciarlo.
La acusación es por abuso sexual gravemente ultrajante y abuso sexual con acceso carnal, ambos delitos agravados por el uso de arma de fuego. Al momento de la detención del agente, le secuestraron una pistola Bersa Thunder con 2 cargadores y más de 40 municiones.
Sin embargo, en su declaración del viernes ante el fiscal Torres, titular de la UFIJ 4 y que subroga en la UFIJ 14, negó los cargos. Según trascendió, el sargento admitió conocer al denunciante, pero sobre el presunto vínculo sexual, negó haberlo forzado y habló de una relación consentida.
Ahora la fiscalía profundizará la pesquisa con los informes psicológicos a la víctima y la información que se pueda obtener de los elementos tecnológicos secuestrados. Divisiones especializadas de la Policía Federal ya trabajan sobre una computadora y un teléfono móvil del policía.
Fuentes del ministerio de Seguridad revelaron que, al momento de su captura, el acusado no estaba en funciones. Agregaron que está vigente aún la presentación de una carpeta médica que aconsejaba su licencia temporaria por estrés.
A la espera de que se libere un cupo de las dos cárceles en el sur bonaerense, el detenido seguía alojado en la delegación bahiense de la PFA. En la causa es asistido por un abogado particular, luego de haber rechazado los servicios del defensor oficial.
Bahía Blanca. Corresponsal.
GL
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