El fútbol a veces no tiene explicación. Para algunos es un simple deporte, para otros es amor, pasión y emoción. Es sentimiento, vida y motivación y por sobre todo, no posee rango de edad. Hay canciones que dicen que es algo que se lleva desde la cuna y para toda la vida, y sin dudas, hay gente que entiende que es así. Este es el caso de Maruca, la fanática de Newell’s.
Maruca tiene 91 años, nació en Rosario y toda su vida estuvo cerca del club de sus amores. Apasionada por el deporte y fiel seguidora de su equipo, visitó el Estadio Marcelo Bielsa durante mucho tiempo, hasta que llegó el momento de alejarse un tiempo -largo- para quedarse en su casa y seguirlo por radio y televisión.
Pero esa pausa que un día empezó se demoró 50 años en terminar. La fanática dejó de ir a la cancha por decisión propia, para quedarse con su familia, en su casa y luego reafirmó su decisión tras el fallecimiento de su marido. Hasta que un día volvió: fue el miércoles 20 de abril para ver Newell’s ante Banfield. Dijo presente y la lepra, como no podría haber sido de una mejor manera, ganó y festejó ante el Taladro por 1-0.
El video de Maruca se hizo viral. Su emoción llegó a todos lados y les hizo saltar lágrimas no sólo a quienes estaban presentes junto a ella en el estadio, sino también a los fanáticos del fútbol que una vez más afirman que no es sólo un deporte.
“Iba a la cancha hace muchísimos años con mi abuelo, que falleció hace veinte años. Había dejado de ir 20 años antes”, contó su nieto, quien la acompañó en su tan deseado regreso.
Como si fuera poca la alegría, al día siguiente de que su historia se hiciera viral, Newell’s tomó la decisión de invitarla a un entrenamiento para que tuviera la posibilidad de conocer a Javier Sanguinetti, el cuerpo técnico y a todos los jugadores que no sólo le brindaron una tarde a pura risa, sino también le obsequiaron la camiseta número 39, de Nazareno Funez -su “nieto adoptivo”-, firmada por él.
En diálogo con Clarín, el nieto de Maruca, Iván Lerro, quien la acompaña a todos lados, habló sobre el regreso de su abuela al estadio, cómo lo vivió y por qué dice que tiene un nieto postizo que se destaca en la primera división.
-¿A qué edad empezó a ir a la cancha?
-Desde muy chica porque su tío por parte de su papá jugaba en Newell’s, pero empezó a frecuentar más con mi abuelo. Ella se casó a los 22 años. Mi abuelo era muy fanático y la actividad del fin de semana era esperar que llegue el domingo que jugaba Newell’s de local para ir a la cancha. Toda su vida acompañó siempre al club, nada mas que por distintas circunstancias en algunos momentos fue dentro de la cancha y otras veces desde la casa.
-¿Por qué dejó de ir?
-Ella dejó de ir por cuestiones de sus hijos, los nietos, las cosas de la casa, se empezó a poner más grande y dejó de lado el estadio. Después falleció mi abuelo y por eso tampoco fue más. Ahora le agarró una emoción muy grande que tiene ganas de volver no solo con San Lorenzo sino en otros partidos también.
Maruca junto a Nazareno Funez en el momento que le obsequió su camiseta.
Foto: @Newells
-¿Qué sintió al volver?
-Un montón de sentimientos juntos. Fundamentalmente por la cancha en sí misma. La última vez que fue ella y al día de hoy, se sorprendió con lo enorme que está, las tribunas nuevas, la gente… Dice que antes el fútbol se vivía de otra manera, la gente estaba sentada, se vestían de manera formal, y ahora es distinto, hay que llevar sí o sí una remera roja y negra. El colorido que le ponía la gente le gustó mucho y le llamó mucho la atención un nene de nueve años que vio el partido al lado de ella, estaba sorprendida porque se sabía todas las canciones y los nombres de los jugadores, de hecho se la pasó hablando durante todo el partido.
-¿Cómo fue la invitación para conocer a los jugadores y al cuerpo técnico?
-Dos o tres horas después del partido nos dimos cuenta que el video se había hecho viral por un periodista de Rosario y yo le respondí el video diciendo que era mi abuela y a la hora me escribieron desde la Comisión Directiva para ponerse en contacto con ella y hacerle un regalo. Después, el representante de Sanguinetti se comunicó con mi hermana para decirle que tanto Javier como el cuerpo técnico la querían conocer y la esperaban al día siguiente en Bella Vista, donde entrena el plantel.
-¿Qué hicieron en Bella Vista?
-Nos invitaron a ver el entrenamiento y a conocer al plantel y al cuerpo técnico. Cuando llegamos nos recibió el vicepresidente segundo, Daniel Asturzzi, y se acercaron un grupo de jugadores que estaban entrenando aparte, la saludaron, le dijeron que les había gustado mucho el video y cuando terminó el entrenamiento vinieron el resto de jugadores con Sanguinetti a saludarla, se contaron anécdotas y entre ellos estaba Nazareno Funez, que ella dice que es su nieto adoptivo. Se sacó fotos, se rió; la pasamos muy bien.
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-¿Y el jugador que es su nieto adoptivo?
-Es Nazareno Funez. Nadie tiene una explicación muy lógica, ja. Ella dice que es porque “va para adelante, le pega al arco“, pero suponemos que es porque al ver los partidos por televisión, el relator suele meterle más emoción cuando la tiene un delantero cerca del arco y a ella le quedó la referencia de que genera peligro. Por eso en el entrenamiento, él le regaló su camiseta firmada y todo. Hasta le confesó, una vez más, que era su nieto adoptivo. Ellos ya se conocían porque coincidió que unas semanas antes mis viejos lo encontraron en un restaurante en Rosario y le pidieron si le podía mandar un saludo a ella. Y ella le respondió con otro video.
Maruca a las risas con Sanguinetti tras pedirle que a Funez “lo haga jugar más”
-¿Qué hizo cuando le regaló su camiseta?
-Él volvió solo. La firmó, se la dio, se abrazaron y ella le agradeció, se puso a llorar de la emoción y le deseó mucha suerte. Después de eso, le dijo a Sanguinetti “tenés que ponerlo más seguido a Funez“. Todos se rieron a carcajadas y le decían que les había dado un “palazo al resto” por pedirlo de titular.
-¿De qué manera lo vivieron los jugadores?
-Se notaba mucho que algunos chicos, los más jovenes, estaban muy emocionados con toda la situación y el cuerpo técnico también, fue muy lindo. Estaban algunos medios de Rosario y nos pidieron si nos podíamos quedar para hacerle entrevistas. Fue un día muy conmovedor.
-Hizo una promesa cuando fue al entrenamiento…
-Sí. Le prometió a Sanguinetti y a todos los jugadores que iba a volver a ir porque le dijeron que ahora, que volvió después de tanto tiempo y ganamos, tiene que ir contra San Lorenzo como cábala, así que ya nos pusimos en campaña para que pueda ir.