En el marco de este conflicto, el gobernador Osvaldo Jaldo, convocó a representantes de UTA y de AETAT (Asociación de Empresarios del Transporte Automotor de Tucumán) a Casa de Gobierno.
Después del encuentro, González explicó que «los empresarios aducen que no están en condiciones de afrontar los costos que le genera el aumento que se consiguió en el AMBA y piden que la Nación les de el mismo trato que el AMBA».
El gremialista, antes de conocerse el dictado de la conciliación obligatoria, comentó que Jaldo les planteó que no se paralicen los servicios «pero nosotros lamentablemente no podemos hacer nada porque la medida fue decretada por el consejo directivo nacional y es en todo el interior del país y no específicamente en la provincia de Tucumán».
Además, González sostuvo que la aplicación de la conciliación obligatoria es injusto porque el AMBA los choferes percibirán el mes de abril con la suba salarial y no así los trabajadores del interior.
Por su parte, Jorge Berreta, vicepresidente de AETAT, analizó: «esto es una medida nacional ante la intransigencia del señor Roberto Fernández conductor de los destinos de todos los trabajadores de UTA, que privilegia a los trabajadores del AMBA con los cuáles ha cerrado el aumento salarial hace diez días atrás. Lamentablemente tanto la Nación como el representante de UTA, no han conseguido, no se han esmerado, y FATAP no ha podido lograr la compensación que tuvo el AMBA».
El empresario dijo que la realidad indica que hoy la Nación privilegia y centraliza todos los esfuerzos en materia de transporte en el AMBA. «Estamos en un momento crítico económico. Más allá de que tenemos la mejor predisposición, las empresas están al borde del colapso total», agregó.
Por último descartó un pedido de aumento del boleto por el momento. «No porque no lo necesitemos sino porque este paro enturbia todo. No queremos presentarlo en esta condiciones».