Boca sigue de fiesta luego de la coronación como campeón de la Copa de la Liga Profesional tras el 3-0 sobre Tigre, en Córdoba. Sin embargo, el plantel que dirige Sebastián Battaglia no puede detenerse demasiado tiempo en las celebraciones porque el jueves se las verá con Deportivo Cali, en la Bombonera, en un partido que debe ganar sí o sí para avanzar a los octavos de final de la Copa Libertadores.
Por eso, más allá del episodio protagonizado por Marcos Rojo en el campo de juego del Mario Kempes, que incluyó un brindis con cerveza y un cigarrillo humeante, los jugadores retomaron este lunes los entrenamientos en el Boca Predio para llegar diez puntos al duelo contra el equipo colombiano liderado por Teo Gutiérrez.
Eso no impidió que Gastón Ávila, el pibe que volvió al club tras un paso por Rosario Central, se diera un gustito. Fue el primero en dejar los vestuarios y asomó por la puerta que lleva al campo de prácticas emulando a Guillermo Francella y su clásico “Hermosa mañana, verdad”.
La humorada, que ya se transformó en meme, en gif y en mensaje viral por WhatsApp, nació a partir de una escena de la película Extermineitors III, la gran pelea final (1991) y se convirtió en un clásico a la hora festejar triunfos deportivos después de que el actor lo hiciera con alguna de las muchas conquistas de su querido Racing Club.
El turno ahora fue de Ávila, el pibe de 20 años, que lleva seis partidos jugados en este 2022 como pieza de recambio de la defensa de Boca, esa que costó armar por lesiones y suspensiones pero que igualmente se convirtió en una garantía que llevó a los de Battaglia a sumar una nueva estrella y dejar atrás todos los cuestionamientos.
