La frase resonó en el acto en Cañuelas, donde Alberto Fernández, flanqueado por su socio Sergio Massa, y el gobernador bonaerense Axel Kicillof, elevó el tono en clara referencia a la gestión de Mauricio Macri. ““Estoy esperando que la Justicia llame a esos ladrones de guante blanco”, dijo sobre su antecesor y funcionarios. Las voces de Juntos por el Cambio no tardaron en replicar. “El peor presidente de la historia”, lo llamaron y hasta alguno lo ninguneó: “Ya no engrupe a nadie”.
En redes sociales, el descargo opositor llegó con el mismo calibre elegido por el Presidente para salir de la interminable rencilla interna que lo aqueja en el Frente de Todos y redirigir la agenda hacia la grieta más cómoda con un dardo que logró impacto. Y que tuvo una curiosidad: como acostumbra su alejada vicepresidenta Cristina Kirchner, Fernández optó por atacar sin mencionar a su objetivo en el ataque, por si faltaba para la efectividad de su chicana.
De los primeros en salir fue el diputado y presidente del bloque de la UCR Mario Negri, una de las voces con lengua más implacable de Juntos por el Cambio. El radical optó por pasar revista de cierto antecedentes de Fernández. “Como abogado defendió a Cristóbal López y como Presidente le hizo una moratoria a medida para zafar de la justicia por retener ilegalmente $15.000 millones del impuesto a los combustibles”. apuntó.
“Qué caradura”, se indignó Alex Campbell, quien optó por directamente arrobar al Presidente en Twitter. “Acá el único ladrón es usted que le robó 2 años de clases a nuestros hijos, fundió miles de pymes y le robó el sueño a millones de Argentinos! (Salvo a los presos que liberó)”, recalentó su réplica el diputado bonaerense, que remató con un hashtag implacable: #ElPeorPresidenteDeLaHistoria.
Breve y al hueso fue el diputado Hernán Lombardi, ex hombre fuerte de los medios estatales en tiempos de Macri. Fue con una apuesta al menosprecio del portavoz que le apuntara. “Ya no engrupe a nadie”, minimizó al Presidente y sus críticas.
“Señor presidente, deje de mentir para encubrir la defraudación al Estado por 46.000 millones de pesos al direccionar 51 licitaciones a favor de Lázaro Báez”, escribió Cristian Ritondo, otro diputado opositor que prefirió sacar trapitos pendientes de “guantes blancos” para enrostrar como contraofensiva.
Ritondo posteó su opinión también televisada, en un pasaje en el que respondió a la frase presidencial. “Muestra el caradurismo de Alberto Fernández, quien cobijó a quienes todavía tienen que dar explicaciones sobre las rutas que no se hicieron durante Lázaro Báez, que no se las tienen que dar a la gente sino a la Justicia”. Y tildó el discurso de Fernández en Cañuelas como “un acto de campaña tratando de hacer lo que su jefa quiere“.
“Si busca responsables del saqueo a la Nación, empiece por su gobierno. De lo contrario, dedíquese a gobernar. Lleva más de 2 años en Casa Rosada y todavía no conocemos su plan”, le espetó Diego Santilli en Twitter.
El respaldo de Victoria Tolosa Paz a Alberto Fernández
Quien salió a respaldar sus dichos fue su candidata devenida ultralbertista Victoria Tolosa Paz. “Las PPP fueron un engaño al pueblo, y es hora que sean investigadas”, dijo la diputada sobre los contratos de Participación Público Privada que se utilizaron durante la gestión de Macri en obras de infraestructura.
La pareja del amigo presidencial Enrique Albistur, prestamista de departamento en Puerto Madero donde vivió el ahora Presidente, fue en línea en su discurso con la portavoz Gabriela Cerruti que amplió la agenda judicial que desea para el macrismo. “A esos ladrones de guante blanco que andan dando cátedra de moral y ética por los medios: esperamos que la justicia los llame. Por la deuda que tomaron, por los parques eólicos, la estafa del Correo y de los peajes. Esperamos que la justicia haga rendir cuentas a los poderosos”, posteó en Twitter.
Y hasta el propio Fernández celebró sus propios dichos en redes. Al repasar la obra de la autopista para la ruta 3, entre Cañuelas y Azul, que diera por inaugurada, abundó en sus críticas.
“Este proyecto era uno de los del esquema de Participación Público – Privada (PPP) del macrismo que, tras dos años, solo contaban con una ejecución del 2%. Cuando nos hicimos cargo de estas obras, los precios bajaron un 70%“, tuiteó Fernández.
DS