Carlos Rodríguez y su mujer fueron desalojados la semana pasada por maquinas demoledoras que arrasaron con su vivienda.
A pesar de la intervención de varios dirigentes, el desalojo a la pareja de ancianos de su hogar en Río Nio se concretó. La empresa que logró la medida de desalojo de los abuelos llevó adelante la destrucción de la vivienda que los cobijo por más de 50 años. Las imágenes que se registraron circuló por las redes sociales conmoviendo a los tucumanos. Los llantos y desesperación de Carlos Rodríguez que pide ayuda generaron tristeza e impotencia.
Por orden de la Juez de Paz de Villa Padre Monti, Elisa Molina fueron desalojados por la policía. La decisión de la funcionaria judicial favorece a la firma Río Nío S.A. y el desalojo se concretó después de tres intentos.
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En este contexto, hablamos con Roberto Rodriguez hijo de los damnificados quien brindó detalles de como avanza la justicia.
“Vinimos desde el 2009 con este problema, entraron a la propiedad autoritariamente. No nos dieron oportunidad de nada”, señaló y agregó “no les importó que mis padres lleven viviendo allí 56 años y mucho menos le importó que tuvieran a su cargo, una hija de 56 años con Sindrome de Dow”.
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