Por segundo fin de semana consecutivo, Luca Langoni fue el gran héroe para los hinchas de Boca. El pibe, que se ganó un lugar tras la lesión de Exequiel Zeballos, volvió a marcar el gol de otro triunfo, esta vez ante Colón. Por su gran presente, el delantero expresó sus ganas de estar desde el arranque ante River tras el entrenamiento al que llegó de forma muy particular.
Pese a que los entrenadores recomiendan comprar una casa antes que el auto, se volvió habitué ver a futbolistas jóvenes con coches de lujo. Sin embargo, este no es el caso de Langoni, quien llegó al predio del Xeneize en Ezeiza en un remis.
La figura de los últimos triunfos de Boca no tiene auto como sus compañeros y, aunque a muchos le pareció extraño su arribo al entrenamiento de este martes, él se lo toma como un detalle más: “Es algo normal para mí”, dijo tímidamente Langoni, dejando en evidencia su humildad y perfil bajo que demostró en las entrevistas post partido.
Aunque su gol valió un triunfo, Langoni preocupó al mundo Boca por su salida ante Colón producto de una contractura. Claro, los hinchas y, sobre todo, Hugo Ibarra no quieren perder más armas ofensivas antes de enfrentar a River. Sin embargo, el pibe dejó en claro que la contractura que sintió en Santa Fe no será un problema: “Estoy bien, por nada en el mundo me pierdo el superclásico”.
Por último, el chico oriundo de Laferrere aseguró que está “muy contento” por el momento que le toca vivir y contó algunas intimidades de las últimas semanas: “La gente del barrio me felicita, los vecinos se acercan y estoy muy agradecido. Las primeras camisetas fueron para la familia, ya las vamos a mandar a enmarcar”, cerró.