Tomar una sopa de verduras es la mejor forma de entrar en calor con una comida saludable y nutritiva. Durante los meses de otoño e invierno la variedad de frutas disponibles se reduce, por lo tanto, y para reemplazar aquellos antioxidantes necesarios para el cuerpo, las verduras pasan a cumplir un rol más importante en el cuidado de la salud.
La zanahoria es uno de los vegetales más beneficiosos porque ayuda a prevenir enfermedades. El brócoli, por su parte, es uno de los más recomendados para combatir las bajas temperaturas ya que es una buena fuente de antioxidantes que potencian el sistema inmunológico. Mientras que las espinacas aportan hierro y magnesio, entre otros nutrientes.