Las vacaciones son esenciales para la salud cerebral y el bienestar general. Durante este tiempo, el cerebro tiene la oportunidad de desconectar de las rutinas diarias y reducir los niveles de cortisol, la hormona del estrés.
Según expertos, los descansos son fundamentales para mantener la plasticidad cerebral, mejorando la capacidad de aprendizaje, la memoria y la creatividad. Sin embargo, no todos los descansos tienen el mismo impacto. Diferentes estudios sugieren que la duración ideal varía según las necesidades del cerebro.
El doctor Claudio G. Waisburg, neurocientífico y médico, explica que los períodos largos de descanso son los más efectivos para lograr una desconexión significativa. Sin embargo, también hay estudios que sugieren que con solo un poco más de una semana ya se pueden notar mejoras sustanciales en el bienestar emocional y cognitivo.