Fernando Martínez, el único boxeador argentino campeón del mundo en la actualidad, volvió a rugir en Japón, donde sufrió una caída, pero se pudo recomponer y venció al japonés por decisión unánime en la revancha contra el veterano Kazuto Ioka y defendió con éxito su título mundial super mosca de la AMB.
El combate fue mucho más cerrado que el primero, que había sido en julio de 2024. Ambos plantearon una pelea entre la media y la corta distancia. El argentino llevó la iniciativa en el inicio y conectó más golpes. Mientras, el japonés respondía con goles a las zonas blandas.
En el tercer round, Kazuto lucía mejor, pero el Pumita conectó golpes claros sobre el final y lo hizo tambalear. El sexto asalto también fue de los mejores de Martínez, mucho más agresivo y dejó sin reacción a su rival.
El momento más dramático de la pelea llegó en el décimo round. Ioka lanzó dos golpes clarísimos primero con la derecha y cerró con un cross de izquierda para mandar a la lona al Pumita.
El argentino se recuperó bien de la caída y cerró bien la pelea. Finalmente, se impuso por decisión unánime de los jueces con resultados en las tarjetas de: 115-112, 117-110 y 114-113.