miércoles 22 de febrero de 2023
Durante el pasado domingo 19 de febrero se celebraron los premios BAFTA en el Reino Unido, dedicados a honrar los logros de la industria cinematográfica. Por medio de su rol como presidente del galardón, el príncipe Guillermo fue acompañado por su esposa, Kate Middleton, al evento especial.
Según fuentes cercanas al palacio, se dice que la princesa de Gales no quería asistir a la gala inicialmente, pero como miembro de la realeza tuvo que estar presente de manera obligatoria, evitando igualmente más rumores sobre la posible infidelidad que ha cometido su esposo.
Por este motivo, Kate aprovechó la situación y lució un dramático look, muy inusual en su historial de estilo clásico y señorial. La princesa deslumbró con un vestido confeccionado en color blanco de Alexander McQueen combinándolo con unos guantes largos en un tono negro, y un pequeño bolso del mismo tono.
Sin duda, fue una elección que no pasó desapercibida por el público y los fanáticos reales, pues la combinación es sumamente peculiar y sútil, ya que el blanco representa el color de la pureza y la inocencia, mientras que el negro presenta completamente lo contrario, significando oscuridad, luto o soledad. Muchos aseguran que a través de su atuendo, Kate Middleton envió su silenciosa declaración ante lo que comentan los medios británicos.
Y es que, una posible ruptura entre los príncipes de Gales sería un escenario sumamente catastrófico para la Casa Windsor, pues en ellos recaerá el futuro de la monarquía inglesa. De esta forma, la pareja deberá manejar adecuadamente sus conflictos para así apoyar al rey Carlos III en su anhelada coronación.