En lo que será el evento más importante del año para el Reino Unido, se aproxima la coronación del rey Carlos III y de la reina consorte Camila. Esta celebración se realizará el próximo 6 mayos, y ya se difundió parte de la lista de invitados, que se estima llegará a más de 3.000 personas.
Entre estas personas que acudirán a la coronación del futuro rey británico se encuentran políticos, miembros de otras casas reales, personalidades influyentes de Europa y, lógicamente, la familia Windsor. En este contexto, surge la duda de qué sucederá con el príncipe Harry, quien se encuentra enormemente distanciado de su padre y su hermano.
Si bien trascendió que el rey Carlos III estaría dispuesto a invitar a su hijo rebelde, trascendió la versión de que para que esto suceda, Meghan Markle deberá quedar afuera del evento. En consecuencia, el príncipe Harry viajaría solo para ver a su padre coronarse.
En este contexto, y para bajar el volumen de los rumores, trascendió que la duquesa de Sussex se quedará en Montecito, California -donde actualmente vive junto a su marido- para organizarle una celebración de cumpleaños a Archie, el primero de sus hijos. Esta versión habría sido difundida desde la misma realeza para no admitir que Meghan no fue invitada a la coronación del rey Carlos III.
Por lo pronto, el príncipe Harry acudiría al Reino Unido para asistir a la celebración de su padre, pero se volvería a Estados Unidos casi inmediatamente. Se estima que en su país natal estaría aproximadamente 48 horas. Sin embargo, también se supo que no tendrá un lugar al frente de la Abadía de Westminster, sino que deberá quedar relegado en las imágenes.
Las celebraciones por la coronación del rey Carlos III, según se estima, durarán desde el sábado 6 de mayo hasta el lunes 8. Es decir, la estadía del príncipe Harry no llegará a ser lo suficientemente larga como para poder disfrutar de todo el fin de semana de evento.
Cabe tener en cuenta que el príncipe Harry y Meghan Markle renunciaron a la realeza británica en el año 2020, mismo año en que se mudaron a California. Desde ese entonces, además de una guerra abierta para con los miembros de la Corona, con muchas declaraciones controversiales en el medio, no acudieron a más actos reales -más allá del funeral de Isabel II-. Informa Voces Críticas.