ginasia 1jpg

El encuentro que protagonizaban Quilmes y Gimnasia de Mendoza en el estadio Centenario se suspendió en el entretiempo por una agresión al arquero visitante Brian Olivera. El árbitro José Carreras consultó al guardameta del elenco visitante y al ver que este no mostraba signos de querer continuar, acusando de estar mareado y con dolor de cabeza, dio por terminado el partido en el entretiempo y con el marcador empatado 0-0.

En Quilmes denuncian que el arquero simuló, que en las cámaras no se perciben una agresión clara y además protestaron porque el cuerpo médico de Gimnasia de Mendoza no habría dejado que los doctores del local lo revisaran. Además, el elenco visitante se habría negado a que trasladen a su guardameta a otra clínica en Quilmes.

Publicidad

Las preocupantes imágenes sumaron otro episodio aún más bochornoso cuando se observaron más proyectiles lanzados sobre la humanidad de Olivera en el momento que era retirado en en camilla rumbo a los vestuarios.

Este domingo, desde la Asociación del Fútbol Argentino emitieron un comunicado acerca del hecho concretamente y la posterior suspensión:

Sin embargo, la comunicación de la AFA evitó anticipar una medida y es lógico, porque es competencia del Tribunal de Disciplina determinar qué va a suceder con el partido. Crece la polémica en la segunda categoría del fútbol argentino.

Publicidad